Peregrinación Italia

Al llegar al aeropuerto de Milán, nuestro equipo lo recibirá cálidamente en este inicio de una peregrinación única en el Año Santo del Jubileo, un momento especial de renovación espiritual que ocurre cada 25 años. Traslado al hotel para descansar y prepararse para los días que nos esperan. Cena de bienvenida en el hotel, donde reflexionaremos sobre el significado de este viaje lleno de gracia y fe.

Alojamiento en Milán. 

Después del desayuno, nuestra jornada comenzará con una visita a la imponente Catedral de Milán, una obra maestra del arte gótico que nos recuerda la majestuosidad de la fe cristiana. Subiremos a su terraza para contemplar la ciudad mientras reflexionamos sobre la grandeza de Dios. A continuación, visitaremos la iglesia de Santa María delle Grazie, hogar de la célebre pintura "La Última Cena" de Leonardo da Vinci, una representación emblemática del sacrificio de Cristo. Almuerzo libre. Después del almuerzo, nos dirigiremos al Santuario de San Ambrosio, donde descansan los restos del santo patrono de Milán, un ejemplo de fe y servicio a la Iglesia. En la tarde, traslado en Padua.  Cena y alojamiento en Padua. 

Después del desayuno, viajaremos hacia Padua, donde visitaremos la Basílica de San Antonio, lugar de peregrinación para millones de fieles cada año. Rezaremos junto a su tumba y admiraremos los frescos que narran su vida. Almuerzo libre.

Después del almuerzo, continuaremos hacia Venecia. Navegaremos en un barco hacia la Plaza de San Marcos, el corazón espiritual y cultural de la ciudad. Visitaremos la Basílica de San Marcos, símbolo del cristianismo y de la devoción en el norte de Italia. También veremos el Puente de los Suspiros, que conecta el Palacio Ducal con la prisión, recordándonos la importancia del perdón en este Jubileo.

Cena y alojamiento en Venecia.

Después del desayuno, nos dirigiremos a Bolonia, donde visitaremos la monumental Basílica de San Petronio, un lugar cargado de historia y fe. También exploraremos la Piazza Maggiore, un punto de encuentro lleno de vida y tradición. Almuerzo libre.

Después del almuerzo, continuaremos hacia Florencia, la cuna del Renacimiento. Visitaremos la majestuosa Catedral de Santa María del Fiore, con su icónica cúpula que parece tocar el cielo. También admiraremos el Baptisterio de San Juan, recordando el sacramento que nos une como cristianos. Cena y alojamiento en Florencia. 

Tras el desayuno, partiremos hacia Asís, un lugar esencial para reflexionar sobre la humildad y el servicio a los demás. Visitaremos la Basílica de San Francisco, un sitio clave para el Año del Jubileo, donde descansan los restos del santo que nos inspira a vivir en paz y armonía con toda la creación.

Luego, visitaremos la Basílica de Santa Clara, donde aprenderemos sobre su dedicación a la oración y la vida contemplativa. Finalmente, recorreremos la iglesia de San Damián, lugar donde San Francisco recibió el llamado del Señor para "reconstruir Su Iglesia".

Cena y alojamiento en Asís. 

Después del desayuno, partiremos hacia Loreto, donde visitaremos el Santuario de la Santa Casa, considerado el hogar original de la Virgen María y un símbolo de la Encarnación. Aquí, oraremos por nuestras familias y nuestras intenciones personales.

Tras el almuerzo, continuaremos hacia Roma, la Ciudad Eterna. Por la tarde, realizaremos un recorrido panorámico, admirando lugares como el Coliseo y el Foro Romano, recordando el legado de los primeros cristianos que defendieron su fe.

Cena y alojamiento en Roma. (3 noches)

Después del desayuno, participaremos en la Audiencia Papal en la Plaza de San Pedro, un momento de profunda comunión con el Santo Padre en este Año Santo del Jubileo.

visitaremos las Basílicas Mayores de Roma, de San Juan de Letrán, la catedral del Papa, Santa María la Mayor, hogar de la primera iglesia dedicada a la Virgen, y finalmente, San Pablo Extramuros, donde se veneran los restos del apóstol Pablo. Almuerzo libre. Después visitaremos los Museos Vaticanos y la célebre Capilla Sixtina, una obra maestra que nos conecta con la historia sagrada y la Plaza de San Pedro, reflexionando sobre el legado de la Iglesia en este Año Santo. Cena y alojamiento en Roma.

Después del desayuno, traslado al aeropuerto para su vuelo de regreso. Con el corazón lleno de gratitud, llevaremos con nosotros las bendiciones del Jubileo y los recuerdos imborrables de esta peregrinación.

¡Esta peregrinación en el Año Santo del Jubileo es una oportunidad única para experimentar la gracia divina y renovar nuestra fe en el camino!